¿ES LA MODERNIDAD UNA VISIÓN BANAL DE LA VIDA EN SOCIEDAD?

Por: Sara Julieth Cortes Rodríguez.

Es probable que en algún momento el ser humano de la modernidad se haya
sentido acelerado sin saber cómo acomodarse o reaccionar a lo que está
sucediendo en el momento, pues todo le exige responder de manera rápida sin
profundizar en ello. En ocasiones, se siguen buscando las cosas fugaces, porque es
lo que conocemos y por lo tanto, somos casi incapaces de tener algo fijo. Lo mismo
sucede con nuestras relaciones amorosas pasajeras, todo se vuelve momentáneo,
temporal e inestable, nos volvemos seres que solo viven de momentos efímeros,
dejando atrás lo que pudo haber sido algo portentoso, algo que nos envuelva con
locura y dure para siempre, aunque ahora ese para siempre se haya vuelto algo
lejano.
Zygmunt Bauman, sociólogo y filósofo polaco-británico, define esto como
modernidad líquida, y afirma: “es como si la posibilidad de una modernidad fructífera
y verdadera se nos escapara de entre las manos como agua entre los dedos.”
(Hernández, J., 2016)
Por otra parte Redondo en el año 2017 dijo: “La vida líquida es una sucesión de
nuevos comienzos con breves e indoloros finales. Las relaciones amorosas acaban
convirtiéndose en breves episodios, en los que priva la búsqueda del beneficio
personal. Cuando una pareja deja de ser rentable, se deja de lado y se busca una
nueva.”
Esto quiere decir, que el tiempo parece pasar más rápido de lo normal, nos
perdemos en las cosas, y todo es muy transitorio, queremos todo rápido, como si
estuviéramos patinando en una pista de hielo, dejando que lo que nos ofrece la
modernidad se apodere de nosotros, a la final todo viene siendo superficial, nos
dejamos llevar por las modas del ahora, porque vivimos anhelando tener todo de
manera inmediata y rápida, lo cual hace que nos perdamos de cosas que son
mucho más profundas.
Un ejemplo de ello es la impaciencia y prontitud con que deseamos las cosas, es
por esto que nos parece infinito cuando una carta que es enviada en un barco se
demora 7 meses en ser entregada o lo que se demora un artista en dibujar, pintar y
crear nuevas obras podría parecer menos significativo que conseguirlo al instante
con una copia o algo impreso. Actualmente, nos aferramos a la idea de no necesitar
algo cuyo valor sea el tiempo, pues todo siempre es cambiante y hay una
probabilidad muy grande de perderlo todo así que “nos preparamos” para la pérdida.
Como conclusión este es el momento de mi vida en donde me doy cuenta que
dejamos que la modernidad se apodere totalmente de nosotros, evita que en cierta
parte tengamos los ojos abiertos a una realidad que muchos conocen pero no
aceptan, siempre siendo tan descuidados y volátiles, creyendo que lo de ahora es lo

que más importa, cuando cada acción que tomamos tiene ese efecto en nuestro
futuro y el futuro es algo de lo que nadie está seguro, porque siempre es
inconsistente, nuestra vida social se ha vuelto algo más cibernético, en donde hablar
por un chat es más fácil que expresarnos frente a frente, nosotros los jóvenes
hemos creado nuestra propia burbuja de irrealismo, en donde todo parece ir como
nos plantea la sociedad.
Bibliografía
Hernández, J. (2016) La modernidad líquida
(Recuperado de:
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0188-77422016000100
279 )
Redondo, M. (2017) 5 ideas de Zygmunt Bauman que retratan a la sociedad
moderna
(Recuperado de: https://hipertextual.com/2017/01/5-ideas-bauman )